Imagen en Blanco

 

Última Modificación
Mie 18 Mar 2015 11:55:03
-
__________
Tenemos 427 invitados conectado(s)

Los efectos nocivos de El Carrasco en la salud pública

Septiembre 13 de 2013
Ph D MéndezConferencia del Ph D Fabián Méndez Paz
Desde hace 40 años, El Carrasco ha venido funcionando como sitio de disposición final de residuos sólidos, lo cual ha generado diferentes afectaciones ambientales a los recursos: aguas superficial y subterránea, aire y suelo, por el desarrollo de las actividades de recepción de residuos de diferentes municipios. Tan sólo hace cinco años la EMAB inició la impermeabilización del suelo para disponer en las diferentes celdas; los años anteriores la disposición se realizaba sin el manejo establecido por la normatividad ambiental.
En el proceso de descomposición biológica de los residuos sólidos, depositados en el sitio, se generan los famosos lixiviados, que son los líquidos que se acumulan en el fondo de las celdas, como consecuencia de la filtración de las aguas lluvias entre los residuos y en el proceso de descomposición y fermentación. Son altamente contaminantes, debido a su carga de compuestos orgánicos e inorgánicos, de modo que su posible filtración al subsuelo y la descarga a fuentes hídricas sin el debido tratamiento, se convierten en una grave amenaza para la salud pública.
El agua subterránea es aquella que se filtra a través del suelo, acumulándose en las capas arenosas o rocas porosas del subsuelo, denominadas acuíferos, de vital importancia para el área metropolitana de Bucaramanga, pues de allí la población extrae el líquido para actividades domésticas, industriales o comerciales.
Para el investigador Fabián Méndez Paz, médico general de la Universidad del Valle, Máster en Epidemiología de la misma universidad, Ph.D en Epidemiología de la Johns Hopkins University USA, y actual Director de la Escuela de Salud Pública de Univalle, y quien ayer, invitado por la CDMB y la UIS, ofreció una conferencia en el Jardín Botánico, los efectos potenciales de los rellenos sanitarios en la salud pública son, entre otros:
1-Aumento de síntomas auto-reportados, como fatiga, somnolencia, dolor de cabeza, problemas respiratorios, de aprendizaje, e infecciones. 2- Bajo peso de los niños al nacer. 3- Talla baja en niños y adolescentes. 4- Defectos congénitos. 5- Algunos tipos de cáncer. 6- Daños cromosómicos.
La ubicación de los rellenos sanitarios cerca a los centros poblados es altamente perjudicial para la calidad de vida de sus residentes, por: 1- En sus inmediaciones se ubican botaderos ilegales. 2- Se aumenta el tráfico pesado, especialmente de volquetas y camiones. 3- Los olores ofensivos. 4- El excesivo ruido. 5- La alta concentración de polvo y basuras. 6- Se deforma el paisaje.
Para el investigador Méndez Paz: “La falta de evidencia concluyente no puede ser justificación para dilatar la toma de decisiones que involucren acciones costo-efectivas, con el fin de proteger a la población. El principio de precaución supone, entonces, la evaluación juiciosa de los efectos plausibles que no dan espera para el desarrollo de acciones que mantengan el nivel de protección a las generaciones actuales y futuras”.
En consecuencia: “El cierre del sitio de disposición final de residuos sólidos denominado El Carrasco, aunque constituye un paso fundamental en el manejo de los pasivos ambientales del área de influencia, no debe, sin embargo, generar una falsa sensación de seguridad, ya que los efectos en el ambiente y la población persistirán por décadas. Lo anterior implica el desarrollo de acciones de monitoreo de los posibles efectos en la salud, además de las necesarias acciones de remediación ambiental”.
  Desde hace 40 años, El Carrasco ha venido funcionando como sitio de disposición final de residuos sólidos, lo cual ha generado diferentes afectaciones ambientales a los recursos: aguas superficial y subterránea, aire y suelo, por el desarrollo de las actividades de recepción de residuos de diferentes municipios. Tan sólo hace cinco años la EMAB inició la impermeabilización del suelo para disponer en las diferentes celdas; los años anteriores la disposición se realizaba sin el manejo establecido por la normatividad ambiental. En el proceso de descomposición biológica de los residuos sólidos, depositados en el sitio, se generan los famosos lixiviados, que son los líquidos que se acumulan en el fondo de las celdas, como consecuencia de la filtración de las aguas lluvias entre los residuos y en el proceso de descomposición y fermentación. Son altamente contaminantes, debido a su carga de compuestos orgánicos e inorgánicos, de modo que su posible filtración al subsuelo y la descarga a fuentes hídricas sin el debido tratamiento, se convierten en una grave amenaza para la salud pública.El agua subterránea es aquella que se filtra a través del suelo, acumulándose en las capas arenosas o rocas porosas del subsuelo, denominadas acuíferos, de vital importancia para el área metropolitana de Bucaramanga, pues de allí la población extrae el líquido para actividades domésticas, industriales o comerciales.Para el investigador Fabián Méndez Paz, médico general de la Universidad del Valle, Máster en Epidemiología de la misma universidad, Ph.D en Epidemiología de la Johns Hopkins University USA, y actual Director de la Escuela de Salud Pública de Univalle, y quien ayer, invitado por la CDMB y la UIS, ofreció una conferencia en el Jardín Botánico, los efectos potenciales de los rellenos sanitarios en la salud pública son, entre otros:1-Aumento de síntomas auto-reportados, como fatiga, somnolencia, dolor de cabeza, problemas respiratorios, de aprendizaje, e infecciones. 2- Bajo peso de los niños al nacer. 3- Talla baja en niños y adolescentes. 4- Defectos congénitos. 5- Algunos tipos de cáncer. 6- Daños cromosómicos.La ubicación de los rellenos sanitarios cerca a los centros poblados es altamente perjudicial para la calidad de vida de sus residentes, por: 1- En sus inmediaciones se ubican botaderos ilegales. 2- Se aumenta el tráfico pesado, especialmente de volquetas y camiones. 3- Los olores ofensivos. 4- El excesivo ruido. 5- La alta concentración de polvo y basuras. 6- Se deforma el paisaje.Para el investigador Méndez Paz: “La falta de evidencia concluyente no puede ser justificación para dilatar la toma de decisiones que involucren acciones costo-efectivas, con el fin de proteger a la población. El principio de precaución supone, entonces, la evaluación juiciosa de los efectos plausibles que no dan espera para el desarrollo de acciones que mantengan el nivel de protección a las generaciones actuales y futuras”.En consecuencia: “El cierre del sitio de disposición final de residuos sólidos denominado El Carrasco, aunque constituye un paso fundamental en el manejo de los pasivos ambientales del área de influencia, no debe, sin embargo, generar una falsa sensación de seguridad, ya que los efectos en el ambiente y la población persistirán por décadas. Lo anterior implica el desarrollo de acciones de monitoreo de los posibles efectos en la salud, además de las necesarias acciones de remediación ambiental”.
CDMB  CDMB